Reconocido mundialmente por sus propiedades saludables y su exquisito sabor, el aceite de oliva, especialmente el virgen extra, no sólo está recomendado para el consumo, también es un potente hidratante para la piel con propiedades reparadoras para numerosas partes de nuestro cuerpo.
En la antigua Grecia, el aceite de oliva y su fruto gozaban de gran relevancia. En los juegos Olímpicos se entregaban coronas hechas con ramas de olivo, y el aceite de oliva ya se utilizaba para masajear el cuerpo de los deportistas tras su participación en estas duras competiciones. Otra aplicación, con el fin de resaltar la belleza de los cuerpos y el rostro, era añadir unas gotas de este oro líquido en cremas, pomadas y afeites.
Hoy en día podemos encontrar infinidad de productos de belleza e hidratantes para la piel o el cabello, cuyo ingrediente principal es el aceite de oliva, pero también podemos emplearlo como tal para elaborar nuestros propios rituales de belleza en casa. Si quieres saber cómo y cuándo utilizarlo, presta mucha atención a todo lo que te vamos a contar hoy.
Cómo hidratar la piel con aceite de oliva
Hay muchas formas de convertir al aceite de oliva en el favorito de tu rutina de belleza e hidratación. Puedes aplicarlo directamente sobre la piel, el rostro o el cuello (recomendable si no tienes piel grasa), o añadir unas gotitas en tu crema hidratante habitual. Otra opción es combinarlo con algún otro ingrediente también natural y con propiedades nutritivas para nuestra piel, por ejemplo el aloe vera. Puedes preparar tu propio hidratante, 100% natural, mezclando una pequeña penca de aloe vera (previamente desinfectada y pelada) y añadiendo dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Conseguirás un extra de suavidad con propiedades cicatrizantes y antiinflamatorias.
El aceite de oliva virgen extra también concentra grandes cantidades de vitamina E y omega 3, que previenen el envejecimiento prematuro de la piel. Para aprovechar todas sus propiedades también puedes aplicarlo como mascarilla facial una o dos veces por semana. Puedes hacerlo, por ejemplo, mezclando una cucharada sopera de aceite de oliva y un aguacate maduro sin piel. Primero, en un recipiente, se tritura la pulpa del aguacate, y luego se le añade el aceite de oliva virgen extra. A continuación, se aplica la mezcla conseguida sobre el rostro y se deja actuar unos 25 minutos antes de retirarla con abundante agua tibia.
Utilizar aguacate es sólo un ejemplo, puedes elaborar mascarillas faciales combinando aceite de oliva virgen extra y otros ingredientes como aguacate, miel, coco o incluso clara de huevo.
Cómo desmaquillarse con aceite de oliva
Si, el aceite de oliva también puede utilizarse como desmaquillante. Para ello, sólo tienes que poner unas gotas de aceite de oliva virgen extra en un disco de algodón y aplicarlo sobre el rostro y cuello para retirar el maquillaje con suaves masajes circulares. De la misma forma, puedes aplicarlo sobre los párpados, o puedes utilizar para los ojos una infusión de manzanilla con unas gotas de aceite de oliva virgen extra. A continuación, es importante limpiarse y lavarse bien la cara con abundante agua y, por último, aplicaremos nuestra crema hidratante diaria habitual.
Cómo cuidar tu cabello con aceite de oliva
El sol, el cloro de la piscina, la sal de la playa o la propia arena, son los mayores enemigos de tu pelo en verano. Por eso es importante, sobretodo en esta época del año, añadir un toque extra de cuidado e hidratación no sólo a nuestra piel, sino también al cabello.
En este sentido, el aceite de oliva es muy útil para devolver a tu melena el brillo y la luminosidad que le falta, además también nos puede ayudar a combatir el exceso de grasa en el cabello, siempre y cuando se utilice no más de un par de veces al mes (una vez cada 15 días, por ejemplo) y en una proporción justa: una cucharada sopera.
Otro ejemplo para mejorar el aspecto de tu pelo, es preparar una mascarilla casera con aceite de oliva virgen extra y miel. Sólo tienes que mezclar tres partes de aceite de oliva y una parte de miel, y aplicar la mezcla sobre el cabello limpio y húmedo. Lo dejamos actuar unos 15-20 minutos y enjuagamos bien, el resultado te sorprenderá.
Si lo que deseas es reparar las puntas dañadas, puedes aplicarlo directamente en las puntas, dejándolo actuar entre dos y tres horas y cubriéndolo con una toalla de ducha. Seguidamente, enjuágalo bien y lávalo con tu champú de siempre.
Aceite de oliva para las pestañas
Casi podríamos decir que no hay ninguna parte de nuestro cuerpo en la que no podamos aplicar aceite de oliva para enriquecernos de todas sus propiedades. Para nuestras pestañas, por ejemplo, ¿sabías que gracias al ácido oleico y a la vitamina E, el aceite de oliva virgen extra puede ayudarnos a conseguir unas pestañas largas y fuertes? ¡Toma nota!
Aceite de oliva y sus beneficios en el embarazo
El consumo de aceite de oliva conlleva una serie de beneficios para nuestro organismo de vital importancia: mejora la salud intestinal, previene la diabetes tipo II, cuenta con propiedades antibacterianas, previene la artritis, previene el cáncer, mejora las funciones cognitivas, es antiinflamatorio, reduce la acidez gástrica, mejora la absorción de nutrientes, disminuye el colesterol malo, mejora la salud cutánea, etc.
Por todo esto y más, es un producto también muy recomendado en mujeres embarazas, para proteger su salud y la del futuro bebé. Pero, además de consumirlo durante el embarazo, también puedes usarlo para tu piel, aplicándolo en tripa y caderas para evitar así la aparición de las temidas estrías.
Como puedes ver, el aceite de oliva virgen extra es uno de los productos más completos de nuestra gastronomía, y el protagonista de nuestra Dieta Mediterránea que no sólo enriquece nuestras ensaladas y platos, sino también nuestra piel, cuerpo, rostro y cabello. ¡Una forma sencilla y económica de mantenernos siempre cuidados por dentro y por fuera! 😉